Nunca pensé que arbitrar un partido,bueno en realidad fueron tres,me pudiera dejar tan cansado,200 días de inactividad se notan y mucho.
Si tuviera que hacer una lista de todos los dolores que tengo hoy ocuparía toda esta entrada sin poder hablar de otra cosa y alguno seguro se asustaría al comprobar que me duelen partes que no sabía que teníamos o que podían doler de alguna manera.
Dejando mis dolencias y agujetas de lado,el regreso a la competición ha sido bueno,hace días pensaba en si sabría colocarme en el campo y moverme correctamente o si sería capaz a seguir el juego y la verdad es que no me costó encontrar la posición y no me costó ver el juego,debe de ser que tantísimo tiempo pitando ayuda a no olvidar nada o casi nada en 200 días sin que nos dejaran arbitrar partidos.
Eso si,las manías que uno tiene no se olvidan ni en 200 días ni en 300 años,eso de tocarse el cinturón a cada momento,hacerse un nudo en la cuerda del silbato o morderlo hasta casi destrozarlo creo que no me dejaran de acompañar nunca...
Aprovechando la entrada quiero una vez más dar las gracias a todos los que me apoyasteis en este tiempo,a todos los que me habéis preguntado y animado desde el que el viernes escribiera la entrada y en general a todo el mundo que aunque solo me leyera supo de la injusta situación. Gracias a todos!!
Ahora, toca agua y limón ... para las agujetas ¡¡¡
ResponderEliminarLo importante no es el dolor, es el hecho de sentirte bien, haciendo lo que te gusta ... una vez más ¡¡¡
Animos ¡¡¡